Tossa de Mar, la ciudad amurallada que encandiló a la actriz Ava Gardner durante su rodaje de «Pandora y el holandés errante» cuyo recuerdo da forma a una estatua a escala en la ciudad. Las imponentes murallas del castillo resguardan la zona más vieja y con más encanto de Tossa de Mar. Su playa más conocida es la playa Gran que podemos verla completamente desde el recinto amurallado.

En la zona que ocupa hoy Tossa de Mar se han hallado evidencias de presencia humana desde el paleolítico, aunque el primer asentamiento importante data de época romana: Turissa. En todo caso, fue en tiempos medievales cuando la Vila Vella adquirió su aspecto actual gracias a la construcción de un castillo (1187) y un recinto amurallado por orden del abad del monasterio de Ripoll, propietario de las tierras. A partir del s.XVIII el pueblo se independizó del monasterio y empezó a crecer más allá de las murallas.

Alejada de las principales rutas terrestres, Tossa de Mar vivió relativamente aislada de grandes guerras y otros conflictos que pudieran haberla destruido, aunque la fortificación fue acosada en numerosas ocasiones por piratas otomanos y árabes. Hoy en día el recinto medieval de la Vila Vella se conserva en perfecto estado y sigue estando habitado. En 1931 fue declarado Monumento Nacional.

La Vila es la típica postal del imponente castillo alzándose sobre el mar para proteger a la ciudad de los piratas. Sus muros de pierda dan cobijo a la zona conocida como el barrio viejo. La muralla y el faro de Tossa de Mar, son una de las grandes atracciones, construida entre el siglo XII y el siglo XIII. Se compone de cuatro torreones y tres torres de vigilancia con forma cilíndrica, siendo la principal la Torre d’en Jonàs, que preside la bahía desde lo alto, pudiendo recorrer toda la muralla.

En el punto más elevado de la muralla encontramos el Far de Tossa, el faro de Tossa de Mar, justo en el lugar donde se situaba un castillo que servía, también, de torre de vigía. Su visita merece la pena, porque se encuentra justo al lado del Centro de Interpretació dels Fars de la Mediterrània, un museo en el que descubriremos todos los detalles de los faros que iluminan el Mediterráneo.

Las playas y calas de Tossa de Mar no tienen nada que envidiar otras de la geografía española. Son una maravilla, aguas cristalinas, limpias y de arena fina y dorada. Algunas de ellas más urbanas y con todos los servicios a tu alcance, otras casi de imposible de acceso.